Un estudio innovador destaca las posibles desventajas de obsesionarse con la felicidad personal. Los investigadores descubrieron que juzgar constantemente la propia felicidad puede afectar negativamente el bienestar psicológico y la satisfacción con la vida.
En un revelador estudio publicado por la Asociación Estadounidense de Psicología, los investigadores han descubierto que juzgar constantemente la propia felicidad puede tener efectos perjudiciales sobre el bienestar psicológico y la satisfacción general con la vida.
El sistema Estudio, publicado en la revista Emotion, realizó tres experimentos con más de 1,800 participantes. Descubrió que las personas que evaluaban con frecuencia su propia felicidad experimentaban niveles más bajos de bienestar. Este patrón se atribuyó, en parte, a una mayor negatividad y decepción en torno a los acontecimientos positivos.
Felicia Zerwas, quien dirigió la investigación mientras era estudiante de doctorado en UC Berkeley, comentó sobre las presiones sociales que contribuyen a este fenómeno.
"Hay muchas presiones sociales, al menos dentro de Estados Unidos, que fomentan la falacia de que la gente debe sentirse feliz todo el tiempo para lograr un mayor bienestar", dijo Zerwas, que ahora trabaja como investigador postdoctoral en la Universidad de Nueva York. dijo en un comunicado de prensa. "En general, permitirse experimentar sus emociones, ya sean positivas o negativas, con una actitud de aceptación podría ser una herramienta útil para buscar la felicidad y aumentar el bienestar".
A diferencia de algunos estudios anteriores, la investigación encontró que el simple hecho de luchar por la felicidad como un objetivo importante no tenía un impacto negativo en el bienestar. Más bien, fue el acto de juzgar consistentemente la propia felicidad lo que resultó problemático.
El diverso grupo de participantes, incluidos estudiantes de la Universidad de Yale, miembros de la comunidad de Denver y Berkeley, California, y participantes en línea de todo Estados Unidos y Canadá, brindaron una perspectiva amplia sobre este tema.
Los participantes respondieron preguntas sobre sus creencias sobre la felicidad junto con medidas de su bienestar psicológico y síntomas de depresión. Los resultados mostraron que preocuparse por su felicidad se correlacionaba con una menor satisfacción con la vida, un peor bienestar psicológico y un aumento de los síntomas depresivos.
El estudio también identificó un vínculo entre las preocupaciones sobre la felicidad personal y percepciones más negativas de eventos positivos.
"Tener altas expectativas de felicidad puede ser perjudicial porque hace que sea más difícil alcanzar el nivel de felicidad que esperamos de un evento positivo", añadió Zerwas.
Las implicaciones de esta investigación son significativas y ofrecen una nueva perspectiva sobre cómo las personas deberían abordar su búsqueda de la felicidad. En lugar de evaluar constantemente el propio nivel de felicidad, el estudio sugiere adoptar una actitud más tolerante hacia las emociones como camino hacia un mayor bienestar.