Un nuevo estudio revela un fuerte apoyo público a las políticas climáticas globales

Un nuevo estudio del Instituto de Potsdam para la Investigación del Impacto Climático revela un fuerte apoyo mundial a las políticas climáticas integrales, lo que sugiere que la cooperación internacional en materia de precios del carbono y redistribución de la riqueza podría acelerar la acción climática.

Si bien los debates sobre el cambio climático pueden no dominar todas las agendas políticas, las medidas sustanciales para contrarrestar el calentamiento global gozan de un sólido respaldo público a nivel mundial. Un estudio reciente, coescrito por el Instituto de Potsdam para la Investigación del Impacto Climático (PIK) y publicado En la revista Nature Human Behaviour, se analiza en profundidad la aceptación de las políticas climáticas internacionales.

Los investigadores iniciaron encuestas en todo el mundo que revelaron un importante apoyo genuino a estrategias climáticas clave, como la fijación internacional de precios del carbono y la redistribución de ingresos a los países menos ricos.

“Este estudio no se centra en la opinión pública actual, sino en actitudes profundamente arraigadas”, declaró en un comunicado de prensa Linus Mattauch, coautor y director del grupo de investigación de Transición Social y Bienestar del PIK. “Por eso, comprobamos la solidez de las respuestas del cuestionario mediante diversos métodos; es decir, verificamos si se mantendrán en el tiempo. Los resultados nos sorprendieron gratamente. Los políticos no deberían temer demasiado a los ciudadanos al impulsar la protección climática global”.

Apoyo mundial a la fijación de precios del carbono

Los resultados alentadores del estudio se basan en dos encuestas exhaustivas y representativas realizadas en 2021 y 2023.

El primer estudio encuestó a aproximadamente 41,000 personas en 20 países responsables de casi el 75% de las emisiones globales de carbono.

El segundo se centró en 8,000 personas en Estados Unidos y la UE.

El apoyo a las políticas climáticas a nivel global fue sorprendentemente alto, oscilando entre el 70% en Estados Unidos y el 94% en Japón.

También hubo un fuerte respaldo a una ambiciosa estrategia global de fijación de precios del carbono que se alinee con el límite de 2 grados Celsius e incorpore una redistribución per cápita de los derechos de emisión entre las naciones.

Poniendo a prueba el compromiso genuino

Además de las técnicas de cuestionario estándar, la investigación utilizó métodos innovadores como experimentos de listas y análisis conjuntos para garantizar la autenticidad de las respuestas.

Al incorporar la propuesta de fijación de precios del carbono entre otras ideas o dividir la política en partes constituyentes, los investigadores validaron que el apoyo no era meramente socialmente deseable sino que representaba convicciones genuinas.

Un cuestionario detallado de la encuesta entre EE. UU. y la UE, que incluía cifras específicas como 90 dólares por tonelada de CO₂ para 2030 y un reembolso de 30 dólares mensuales por cada adulto a nivel mundial, obtuvo un fuerte apoyo a pesar de que los encuestados sabían que sus propios países podrían sufrir pérdidas financieras. Tres cuartas partes de los encuestados de la UE y más de la mitad de los de EE. UU. aprobaron este plan.

Implicaciones para la política climática global

El punto de referencia del estudio —la fijación de un precio global del carbono con redistribución— se considera un objetivo final.

Siendo realistas, los esfuerzos actuales se centran en la formación de "clubes climáticos" que involucren a varios países o en la firma de acuerdos climáticos ("Asociaciones para la Transición Energética Justa") entre países industrializados y naciones individuales del Sur Global. La aceptación pública sigue siendo crucial para estas iniciativas.

Los investigadores confían en que la gente de los países ricos esté dispuesta a pagar por la protección del clima en las naciones más pobres.

“En este contexto, la pregunta es por qué la comunidad internacional no avanza con mayor rapidez”, añadió el autor principal, Adrien Fabre, del centro de investigación francés CIRED. “Aún no está claro cómo surgen los malentendidos y las percepciones erróneas en el discurso público, ni qué papel desempeñan los grupos de interés. Quizás los límites de lo que se considera realista estén cambiando. Nuestro trabajo podría contribuir a ello”.

Mirando hacia el futuro

Esta investigación destaca una base prometedora de apoyo público para políticas climáticas globales más ambiciosas. A medida que los responsables políticos consideran las acciones futuras, las conclusiones de este estudio subrayan que un amplio respaldo público podría allanar el camino para una cooperación internacional más sólida en la lucha contra el cambio climático.

Fuente: Instituto de Potsdam para la Investigación del Impacto Climático