Las técnicas de asesoramiento matrimonial podrían ayudar a superar las divisiones políticas, según un nuevo estudio

Un estudio reciente dirigido por Notre Dame revela que las intervenciones inspiradas en el asesoramiento matrimonial pueden reducir la polarización política, fomentando una mayor comprensión y unidad entre demócratas y republicanos.

Las investigaciones indican que la creciente polarización socava la democracia al alentar a los ciudadanos a valorar las lealtades partidistas por encima de los principios democráticos. En un momento en que Estados Unidos enfrenta profundas divisiones políticas, la necesidad de soluciones innovadoras para superarlas es más crítica que nunca.

Un estudio publicado En un artículo sobre comportamiento político y coescrito por Laura Gamboa, profesora adjunta de democracia y asuntos globales en la Escuela Keough de Asuntos Globales de la Universidad de Notre Dame, se sugiere que las técnicas de asesoramiento matrimonial podrían ofrecer una solución inesperada.

“La polarización amenaza la democracia y es vital encontrar formas de reducirla”, dijo Gamboa en un comunicado de prensa“Este estudio utiliza un enfoque único para comprender por qué funciona una intervención despolarizante comprobada. Con los esfuerzos despolarizantes que se multiplican en todo Estados Unidos, comprender no solo si funcionan, sino cómo y por qué, es más importante que nunca”.

El estudio se centró en la “reflexión grupal recíproca”, una intervención derivada de la terapia de pareja. Este método se puso a prueba en talleres con grupos bipartidistas de estudiantes universitarios de cuatro campus universitarios.

Los investigadores colaboraron con Braver Angels, una organización no gubernamental conocida por sus talleres “rojo/azul” que adaptan estrategias de asesoramiento matrimonial para abordar la polarización política.

Durante los talleres, los participantes interactuaron principalmente con sus compañeros de partido, reflexionando sobre las creencias y actitudes de su propio grupo. Cuando se reunieron grupos de bandos opuestos, el objetivo no fue persuadir ni encontrar puntos en común sobre cuestiones específicas, sino fomentar la comprensión y la empatía por las motivaciones y experiencias del otro bando.

Los resultados mostraron que los talleres redujeron los signos explícitos e implícitos de división partidista entre demócratas y republicanos.

Además, los participantes se mostraron más inclinados a apoyar iniciativas de despolarización, como contribuir a programas que promuevan debates políticos constructivos entre los jóvenes estadounidenses. Aunque la reducción inmediata de la división disminuyó un poco con el tiempo, el compromiso de los participantes con las iniciativas de despolarización se mantuvo firme durante al menos seis meses.

“A diferencia de intervenciones similares, estos talleres combinan estrategias que han demostrado reducir las divisiones políticas, como compartir información sobre las creencias y políticas de las personas del otro lado, con actividades diseñadas para generar empatía y comprensión, basadas en ideas de la psicología social”, agregó Gamboa.

Estos conocimientos son fundamentales, ya que demuestran el potencial de combinar elementos informativos y emocionales en los esfuerzos de despolarización. Al fomentar una mejor comprensión y mejorar la comunicación entre grupos opuestos, se sientan las bases para una democracia más cohesionada y saludable.