Una nueva investigación destaca el potencial de la inmunología de sistemas para combatir la sepsis, una de las principales causas de muerte, y ofrece esperanza de reducir la mortalidad en futuras pandemias.
La sepsis es una enfermedad letal que a menudo pasa desapercibida, pero un nuevo enfoque liderado por investigadores podría cambiar la forma en que diagnosticamos y tratamos a este asesino silencioso. Según un estudio reciente publicado En Frontiers in Science, la inmunología de sistemas puede ser la clave para combatir la sepsis y reducir el número de muertes en futuras pandemias.
“Necesitamos adoptar un enfoque concertado para abordar la sepsis”, dijo en un comunicado el autor principal Robert Hancock, profesor del Centro de Investigación de Enfermedades Microbianas e Inmunidad de la Universidad de Columbia Británica. comunicado de prensa.
La sepsis se produce cuando la respuesta inmunitaria del organismo se descontrola y provoca una inflamación que conduce a una insuficiencia multiorgánica. Es responsable de aproximadamente el 20% de las muertes en todo el mundo y rivaliza con las enfermedades cardíacas y el cáncer en cuanto a letalidad.
A pesar de ello, la investigación y el desarrollo del tratamiento de la sepsis reciben sólo una fracción de la financiación asignada a otras enfermedades importantes.
La promesa de la inmunología de sistemas
La complejidad de la sepsis, que se desencadena por diversas infecciones y presenta síntomas diferentes en cada paciente, dificulta su diagnóstico y tratamiento eficaz. Los síntomas iniciales suelen ser similares a los de otras enfermedades, lo que lleva a una intervención tardía y a una mayor mortalidad.
La inmunología de sistemas podría cambiar eso mediante el uso de modelos matemáticos y computacionales avanzados para comprender el sistema inmunológico con un detalle sin precedentes.
Al analizar grandes volúmenes de datos ómicos (como cambios en la expresión genética, proteínas y metabolitos), los investigadores pueden identificar patrones que apuntan a la sepsis. Este método ya ha ayudado a los científicos a descubrir señales de alerta tempranas y diferentes subtipos de sepsis, allanando el camino para tratamientos más precisos.
“Actualmente, solo se invierte una cantidad muy pequeña de fondos en la investigación y el desarrollo de productos contra la sepsis, y sin embargo, la sepsis es una causa de muerte tan importante como las enfermedades cardíacas y el cáncer, y la principal causa de muerte en pandemias”, añadió Hancock.
Impacto en futuras pandemias
La relevancia de esta investigación se extiende más allá de los casos actuales de sepsis y se extiende a futuras pandemias.
Por ejemplo, los casos graves de COVID-19 suelen derivar en sepsis viral, y se cree que muchas muertes durante pandemias históricas como la pandemia de gripe de 1918 fueron causadas por sepsis. Por lo tanto, los tratamientos eficaces contra la sepsis podrían salvar innumerables vidas en futuros brotes, independientemente del patógeno causante.
“Necesitamos invertir en estudios ómicos más amplios de pacientes, desarrollar nuevos modelos animales y organoides que reflejen la heterogeneidad de la sepsis e invertir en diagnósticos tempranos de la sepsis y tratamientos que corrijan o complementen la inmunidad defectuosa en los pacientes con sepsis”, agregó Hancock.
Llamado a la acción
A pesar de estos prometedores avances, la inmunología de sistemas aún no se ha implementado ampliamente debido a los altos costos y la necesidad de una gran cantidad de datos. Los investigadores piden una financiación más específica y estudios con pacientes más amplios para avanzar en este campo.
“Los métodos ómicos que sustentan la inmunología de sistemas son relativamente caros por paciente”, añadió Hancock. “Será necesario un esfuerzo concertado de las partes interesadas para generar los datos necesarios para obtener más información”.
Si trabajamos en colaboración y aumentamos la inversión, podemos tener la esperanza de cambiar el rumbo de la lucha contra la sepsis. Esto no solo podría salvar millones de vidas, sino también fortalecer nuestras defensas contra futuras pandemias. La sepsis puede ser una enfermedad compleja y multifacética, pero con el enfoque adecuado, nos encontramos en el umbral de avances transformadores.