Investigadores de UT Arlington han identificado una enzima, IDO1, que puede desactivarse para ayudar al cuerpo a mantener niveles saludables de colesterol. Este avance podría allanar el camino para nuevos tratamientos para diversas enfermedades relacionadas con la inflamación.
Un equipo de científicos de la Universidad de Texas en Arlington ha realizado un descubrimiento revolucionario que podría transformar la forma en que controlamos los niveles de colesterol y tratamos diversas enfermedades graves. Los investigadores han identificado una enzima llamada IDO1 que, al bloquearse, ayuda a mantener niveles saludables de colesterol y controla la inflamación. Este hallazgo tiene un gran potencial para el desarrollo de nuevos tratamientos para enfermedades que afectan a millones de estadounidenses.
“Descubrimos que al bloquear la enzima IDO1, podemos controlar la inflamación en las células inmunitarias llamadas macrófagos”, declaró en un comunicado de prensa el autor principal, Subhrangsu S. Mandal, profesor de química en la Universidad de Texas en Arlington. “La inflamación está relacionada con muchas afecciones, desde enfermedades cardíacas hasta cáncer, diabetes y demencia. Al comprender mejor la IDO1 y cómo bloquearla, tenemos el potencial de controlar mejor la inflamación y restaurar el procesamiento adecuado del colesterol, deteniendo así muchas de estas enfermedades”.
La inflamación es un arma de doble filo para el sistema inmunológico, esencial para combatir infecciones y curar heridas, pero potencialmente dañina cuando se vuelve crónica o anormal debido al estrés, una lesión o una infección.
Durante estos períodos disfuncionales, los macrófagos (células inmunes esenciales que absorben el colesterol) no logran procesarlo adecuadamente, lo que conduce a una variedad de enfermedades crónicas.
El equipo de investigación descubrió que la enzima IDO1 se activa durante la inflamación, produciendo una sustancia llamada quinurenina. Esta sustancia dificulta la capacidad de los macrófagos para procesar el colesterol.
Sin embargo, cuando se inhibe la IDO1, los macrófagos recuperan su capacidad para procesar el colesterol. Este descubrimiento crucial apunta a una nueva estrategia para prevenir las enfermedades cardíacas manteniendo los niveles de colesterol bajo control.
Además, el estudio descubrió que otra enzima, la óxido nítrico sintasa (NOS), exacerba los efectos perjudiciales de la IDO1. Por lo tanto, la acción dirigida a la NOS también podría ofrecer beneficios terapéuticos para controlar los problemas de colesterol relacionados con la inflamación.
“Estos hallazgos son importantes porque sabemos que una acumulación excesiva de colesterol en los macrófagos puede provocar obstrucción arterial, cardiopatías y muchas otras enfermedades”, añadió Mandal. “Comprender cómo prevenir la inflamación que afecta la regulación del colesterol podría conducir a nuevos tratamientos para afecciones como cardiopatías, diabetes, cáncer y otras”.
La investigación del equipo, publicado En ACS Publications, representa un paso significativo hacia tratamientos más efectivos para las enfermedades relacionadas con la inflamación.
A continuación, los investigadores buscan profundizar en la relación entre IDO1 y la regulación del colesterol, y explorar el papel de otras enzimas en el proceso. Si se desarrolla un método seguro para bloquear IDO1, podría allanar el camino para el desarrollo de fármacos innovadores que combatan diversas enfermedades inflamatorias.